EL NIÑO QUE LLEVAMOS DENTRO

EL NIÑO QUE LLEVAMOS DENTRO

Vamos a dedicar esta sesión al niño o a la niña que fuimos, 

y que todavía somos, que todos llevamos dentro.

Lo que el AT llama NIÑO NATURAL

Desde este estado sentimos nuestras emociones

Sentimos miedo,

                       

Nos reímos y disfrutamos,

                                         

     Nos dejamos llevar por la rabia,

                                                         

          Nos sorprende todo lo que nos rodea,

                                                                     

               Disfrutamos sintiéndonos queridos,

                                                                                                                      Estamos tristes,…

Ahí está escondida nuestra creatividad, esa que nos permite 

ver, sentir, hacer cosas a nuestra especial manera.

Para descubrir nuestro niño o niña vamos a hacer una

visualización, y al final de la sesión hablaremos del gran 

poder pedagógico de las visualizaciones.

LLEVO MI NIÑO A CLASE(Visualización)

Nos sentamos cómodamente en la silla, las manos 

apoyadas en las piernas, los isquiones en 

contacto con la silla, la espalda en el respaldo, los pies 

en el suelo,…

(EMPIEZO A HABLAR EN PRIMERA PERSONA)

Tomo contacto con mi respiración, siento como el aire entra 

y sale de mi cuerpo,…

Ahora voy a buscar dentro de mí a esa niña, a ese niño que 

fui, voy a dejarle ser, a dejarle sentir,… a 

encontrarme con sus miedos, con sus sueño, con su risa,…

Voy a coger su mano, siento su palma en la mía,… y voy a 

llevarle a mi clase de ahora.

Voy a tomarme mi tiempo para enseñarle mi mesa, los 

materiales de la clase, las carpetas y los 

cuadernos,… Voy a ver mi clase de ahora a través de sus 

ojos, de mis ojos de niña, de niño,… Del 

niño y la niña que fui, y que aún está dentro de mí.

Ahora voy a encontrarle un sitio para ella, o para él,

¿Con quién voy a sentarle? ¿Qué lugar le gustará más? 

¿Quiénes serán sus amigos?

Voy a sentirme en su piel para recordar sus gustos, para 

saber qué tareas le costarán más, voy a 

explicarle las actividades que le harán reír, y aquellas que 

seguramente le saldrán mal, voy a decirle 

dónde se hace la fila, y a proteger sus miedos

¿A qué personas o situaciones temerá?

¿En cuáles se sentirá segura, o seguro?

Ahora voy a acompañarla otra vez a la salida, voy a darle un 

abrazo,

A ese niño o niña que fui, y que aún está dentro de mí.

Me tomo mi tiempo para despedirme de ella, para darle el 

lugar que se merece dentro de mi…

Voy tomando otra vez conciencia de mi respiración, siento 

como el aire entra y sale de mi pecho, 

como energiza mi cuerpo,…

Siento la silla en contacto con mis piernas, con mi espalda, 

siento mis maños sobre mis piernas, el 

suelo debajo de mis pies,…

(VUELVO AL PLURAL)

Escuchamos ya los ruidos del colegio, y nos tomamos 

nuestro tiempo para ir abriendo los ojos, 

para volver a nuestro grupo de compañeros.

LAS VISUALIZACIONES

Partimos de una relajación, por eso estamos más receptivos 

y predispuestos a aprender.

Utilizamos las imágenes para ir donde queramos ir:

Para entender una lectura,

Para aprender cosas sobre nuestro cuerpo,

Para visitar un lugar,

Para entender un teorema,

La creatividad del maestro aquí es esencial. Os sorprenderá 

todo lo que se os ocurre.

Cosas importantes:

·         No anticipar demasiado para que los niños se excitan. Entrar en la visualización sin más (cerramos los ojos, sentimos nuestra respiración,..)

·         Hablar suavemente, sin que ninguna palabra sorprenda a los niños, para no distraerles.

·         Se puede comenzar en plural, para seguir luego en primera persona; también se puede hablar al grupo todo el rato, eso lo que os de más resultado; pero establecer un criterio, para no cambiar arbitrariamente a lo largo de la visualización de singular a plural.

·Es muy importante trabajar la postura sentado.

 Si los niños se acostumbran sentarse bien será el punto de 

partida para comenzar.

Una imagen clara de los isquiones facilitará que sentarte correctamente sobre ellos.